Dejaré en claro que puedo escribir mucho sobre anime. Tengo reseñas aquí escritas. La cosa va por cuánto me ayudó a escapar de mi realidad mental oscurecida por el peso de mis acciones y sufrimientos.
Si bien, como muchos de mi generación, el primer anime habrá sido Dragon Ball o Caballeros del Zodíaco, he decidido tomar una fecha y anime simbólico del inicio de mi inmersión en el campo este. Y siempre ha sido, y será, el inolvidable Yuri!!! on Ice de Sayo Yamamoto, estrenado el 6 de Octubre de 2016. Todos los datos, aquí.
A la fecha, he visto seguramente 600 animaciones, sin contar segundas o terceras temporadas, especiales directo a video (OVA), películas relacionadas, ni animaciones de principiantes o graduados como la de GeiDai.
Estoy felíz de sumergirme en algo que me dio vida. Porque muchas veces, sencillamente pongo la música de Macross y me olvido de todo. O pienso en memes de Attack on Titan o Chihayafuru y viajo, es increíble lo bien que me hace. Soy felíz con poco, a veces. Y si bien caigo, fallo, me sigo escapando de mi estudio… aprendí: tengo de dónde obtener felicidad. Con pocos clicks. No es droga, pero casi. En eso me cuido. Pero ha ayudado. De hecho, estoy aprendiendo dibujo por esto. Asique felíz estoy. Y espero estarlo mejor y sin necesidad de artificios 2D.
