He aceptado un volante político de unos militantes radicales en Villa Crespo, considerando que nadie les agarraba los papelitos. Venía una boleta de Vidal, un panfleto de campaña y uno pidiendo la afiliación a la UCR. Vamos de a pasos.
Cabe destacar el discurso ‘halcón’ aquí fotografiado. Las libertades, la educación, el trabajo. Una mezcla de libertarianismo, clasemedierías propias de la UCR y bread and butter.
No lo ven ,pero juro que puse signos de pregunta sobre una frase. Toda esta gente más tibia que una botella de gaseosa al natural ahora quiere dar batallas. Notable.
Nótese ahora sin ironías que sigue el logo JxC (Junts pel Catalunya?) arriba a la derecha, y el bold en los nombres de pila de la gente. Marcos Peña aún sirve, parece.
Como propuestas, no hay muchas cosas concretas, novedosas o que no sean contradictorias con su gobierno porteño. En Educación quieren continuar con sus acciones, o sea seguir chocando con gremios y avalando con fuerza a Padres Organizados. Proponen bajar los impuestos que subieron o mantuvieron en plena cerrazón de 2020. Tibia idea de flexibilizar los contratos. Reiteran la idea de beneficios fiscales al empleo joven, que sigue sin concretarse a pesar de promesas hace una década por parte de todo gobierno. Y cierran con un compendio de frases para la militancia cambiemita dura, again. Parece que necesitan convencer mucho a su propia gente.
El volante de Vidal será obviado. No aporta nada. Ahora bien, el volante del radicalismo me dio una buena idea de quienes son y que ofrecen de novedoso. Son parte de la elite (CNBA, Pellegrini, UBA) y proponen que los ayudes a sostener su kioskito. Seguiré investigando a esta gente.
En fin. Una lista que no convence ni a sus votantes base, propuestas vagas o contradictorias con su accionar, acompañado por una lista de gente del deep state posando de pobrecitos, como si no fuesen ellos mismos la casta política que nos maneja hace décadas y nos dejó de rodillas en el fango. Por eso Juntos se cae solo.